El poder del rosa... y adios broncas en bici!

Hola amigos!! Hoy quiero proponeros un experimento sociológico de gran calado, algo que hará temblar los cimientos de nuestra sociedad tal y como la conocemos. No hablo de hacer un gran hermano ciclista, ni de ver si los ciclistas salivamos cuando suena un timbre de bicicleta. Hablo sencillamente de la posibilidad, no comprobada científicamente, de que el color rosa disminuya exponencialmente la agresividad generada hacia los ciclistas (risas enlatadas). Si te estás partiendo la caja, tienes toda la razón del mundo. O quizá no. La verdad es que llevo meses sospechando este misterioso efecto del color rosa en los conductores de coches.

Esas prendas protegen más que un reflectante :-P

Os cuento. Yo no suelo ir de rosa, es mi color menos favorito del mundo. Si por mi fuera, vestiría siempre de negro y azul marino, con algún toque gris, verde, mostaza, violeta... y poco más. Pero ocurre que el rosa me favorece, así que tengo algunas cosas rosa fucsia. Todo empezó con una bufanda de lana en invierno y una blusa de raso de verano, ambas cosas regaladas por mi madre y mi abuela porque "hay que ver que bien te queda y no siempre tan oscura que pareces un blablabla"... La cosa es que empecé a notar cosas raras, imperceptibles casi, cuando circulaba en bicicleta con estas prendas. La necesidad de hacerme visible me hizo adquirir dos prendas más, un impermeable corto con capucha rosa coral, casi fosforito, y una chaqueta de punto del mismo color. Ahí mis sospechas se hicieron evidentes: además de aumentar mi visibilidad, los conductores de coches se portaban MEJOR. Me cedían más el paso cuando les tocaba. Me adelantaban dejando más distancia de seguridad. La agresividad cochista hacia mi persona disminuía, no había duda. Me pareció algo alucinante.

¿A qué se debe esto? ¿Los conductores masculinos identifican el rosa con la femineidad y su orgullo de machos dominantes les indica que la ciclista en cuestión es guapa y casadera y necesita protección y buenos modales, como cuando los caballeros te abren la puerta y ceden el paso? ¿Las conductoras femeninas quedan flasheadas por tu (de nuevo) evidentísima femineidad y a la vez por tu faceta de mujer moderna-y-valiente-que-mola-mucho y sienten la necesidad de estar a tu altura conduciendo bien y respetándote? Misterio misterioso. Que venga Iker Jiménez y lo lleve a Cuarto Milenio, por favor.

Esto sólo es equiparable al efecto "sillita portabebés". Aunque ese a veces es contraproducente, a veces genera agresividad contra el portador, porque debemos estar muy locos para llevar ahí a nuestros hijos y entonces no merecemos respeto. Pero si somos una ciclista-señorita-pepis si. Por todo esto decidí poner todas las cartas sobre la mesa y comprarme un abrigo de vestir rosa palo, oversize (que significa que queda como un saco pero es muy estiloso, palabra). Y oyes, queda inaugurado este pantano. El efecto rosa en bici es innegable, yo calculo que disminuye la agresividad hacia el ciclista en un 30% (Fuente: estudio propio. Esto para que no se diga que no somos científicos en este blog. Si se lo permitís a los anunciantes de champú y de yogures, porqué a mi no??).

Así que por una parte, os animo a comprobarlo, seais hombres o mujeres (total, de espaldas en la bici, muchos somos bastante neutros). De hecho, os reto a que lo comprobéis!!! Y tu, ¿has notado algún efecto de tu forma de vestir o los colores que llevas en los conductores? Espero que este post te haya arrancado una sonrisa. Nos vemos la semana que viene!
Hasta pronto ciclistas!!