Ya sé que es verano, pero bueno, la realidad de la vida es que en este momento hay mucha gente que tiene que estudiar, entre ellos, yo misma. Puede que te hayan quedado asignaturas para septiembre, ya sea de
secundaria o de la universidad. Puede que estés a tope con el
TFM, que lo quieres entregar en septiembre. O que como yo, estés preparándote para unas
oposiciones o una promoción interna, quizá incluso trabajando al mismo tiempo. En todos estos casos,
ir en bicicleta una o dos veces al día te beneficia. En este post te voy a explicar porqué.
|
Imagen via www.vivirsalud.imujer.com |
Cuando estudias muy aplicadamente, todo tu cerebro se pone en modo eficiencia. Puede que incluso por la noche sueñes con cosas que has estudiado durante el día. Tu cerebro está fijando conocimientos y generando relaciones conceptuales que te ayudan a asimilar y a hacer tuyas las cosas que estudias. Pero ya sabes,
mens sana in corpore sano, o lo que es lo mismo,
lo mejor es conseguir un equilibrio entre actividad física y cerebral. Tu cerebro estará más oxigenado y trabajará mejor, tu generarás más endorfinas que te compensarán por el fastidio de todo ese gran esfuerzo intelectual, y
es muy posible que desaparezcan tus problemas para conciliar el sueño debidos a los nervios y la tensión.
Además, la bicicleta, como muchas otras actividades o disciplinas físicas, te enseña cosas que sin darte cuenta te convierten en una persona más flexible, y esto es muy beneficioso para enfrentarte a los retos intelectuales que tienes ante tí. Si eres más flexible, el día del examen no montarás un drama porque se te haya olvidado en casa tu bolígrafo favorito. Mantendrás la calma igual que aquel día que ibas en bici y empezó a llover a cántaros. Y harás tu examen igualmente, y seguro que lo haces bien. La bicicleta y otros deportes te convierten en una persona
más resiliente, es decir, que te recuperas más fácilmente ante traumas y contratiempos. Aprendes a relativizar y a preocuparte sólo por lo que es realmente importante, y te preocupas de manera positiva y productiva, no negativa. Ese cambio de fecha en el examen, esos compañeros de proyecto que no están dando la talla, o esos temas que te tienes que repetir porque no están todo lo bien que recordabas, todo eso serán cosas que simplemente irás superando, sin que te supongan tanto problema.
También te enseñará la gran lección de la dosificación de fuerzas: cómo no quemarte al principio si estás en una carrera de fondo, o cómo darlo todo en el sprint final, que ya descansarás luego.
La bicicleta también será tu medio de transporte ideal en momentos de gran esfuerzo intelectual. Supondrá un momento en el que disfrutar algo de tiempo para tí,
desconectando tu mente durante el rato en el que tienes que estar concentrado para circular, a la vez que haces algo de ejercicio en una época de tu vida en la que no te sobra el tiempo. Será tu balón de oxígeno, y tu amiga ideal para salir a desestresarte después de un día entero pegado a tu ordenador, o en tu
ruta diaria hacia la biblioteca. Si puedes pasar por un parque en alguna de tus rutas, mejor que mejor.
Tus ojos agradecerán en cualquier caso poder mirar a lo lejos, en vez de a folios, pantalla de ordenador, o cogotes de otras personas en el transporte público. Además,
si te enfrentas a oposiciones en las que tienes que pasar pruebas físicas, como bombero o policía, la bicicleta será una gran aliada para los entrenamientos.
Espero que estos consejos os ayuden, y mucha suerte! ¿Alguien que estudie y monte en bici quiere contar su experiencia?
Hasta la semana que viene, ciclistas y estudiantes!
Y seuguro que no llegas tarde a los examenes. Yo estoy tan enganchado a la bici que al final tomo caminos más largos y me quita horas de estudio :P
ResponderEliminarJajaja. Bueno, eso ya es tu fuerza de voluntad... recuerda tus metas y cíñete a un horario! Pero al menos estás montando en bici, más beneficioso que perder tiempo de estudio viendo la tele o mirando las pelusas del techo! :-) gracias por comentar y suerte!
Eliminar